Por Rolando Gallego @rolandogallego

El sonido que acecha 

Vecinos.

Buenos.

Malos.

Necesarios.

Muchas veces es muy difícil convivir con ellos. Pero en las grandes urbes la invisibilidad y el retraimiento pueden hacer más llevadero todo. O no.

Kleber Mendonça Filho toma este punto para su filme Sonidos vecinos (O som ao rededor, Brasil, 2012) un filme coral con una narrativa episódica que agrega ritmo a cada uno de los personajes.

Hay un ama de casa cansada de su rutina (Bia, interpretada por Maeve Jinkings) un joven llamado João (Gustavo Jahn) y un viejo llamado Francisco dueño del barrio en el que todos conviven hasta que la llegada de Clodoaldo (Irandhir Santos) y su empresa de seguridad le quita el trono.

En una compleja estructura de relaciones, en la que nada queda librado al azar “Sonidos vecinos” reflexionará sobre las clases sociales, la vivienda, la familia, el amor y principalmente sobre un estado de alerta amenaza constante sobre el otro, que justamente generará la desconfianza sobre el cimiento de las relaciones.

La progresión lenta y cansina, el virtuosismo y estilo de algunos planos, la ubicación de la cámara en algunas escenas y la presentación de algunas situaciones que no hacen a la historial le posibilitan una construcción episódica que mantiene en vilo hasta el último momento.

Curioso fresco de la sociedad brasilera actual, en sintonía con la de otros países en los que la violencia y el estado de alerta son el capital común.

País: Brasil
Año: 2012
Director: Kleber Mendonça Filho
Elenco: Irma Brown, Sebastião Formiga, Gustavo Jahn, Maeve Jinkings, Irandhir Santos, W.J. Solha, Lula Terra
Duración: 131 minutos
Género: Drama, Thriller