Por Ma Ignacia Barja @mibarja

¡Estoy indignada! He sido engañada por un tráiler, suele suceder más de lo que uno quisiera, pero les confieso que le tenía algo de fe a la nueva película de Daniela Goggi «El Hilo Rojo». No puedo negarles que siempre supe, en mi fuero interno, que era una producción totalmente comercial, pero si bien la película Abzurdah, de la misma directora y con Eugenia Suarez como protagonista, había sido todo un éxito de taquilla y producción, me era un referente potente de que esta no podía ser tan mala… Error!

Cuenta una leyenda que existe un hilo rojo invisible que conecta a las personas destinadas a estar juntos, así se dan los primeros minutos de este film, protagonizada por Benjamín Vicuña y Eugenia “China” Suárez. El astuto enganche de este mito apuntaba a que podía ser una “buena película argentina” o románticamente entretenida…Pero, mis latin cinéfilos, no los puedo engañar, no es así!

Me gusta escribir en positivo y sólo sobre películas que me gustan. Siempre pienso: ¿Para que voy a opinar de algo que no me gusto? No soy critico de cine, o por lo menos no me siento uno como tal, ya hay bastante intelectual del séptimo arte y la imagen que le encanta escribir en difícil y con análisis profundamente complicados y existenciales, sobre todo en redes sociales ¿Para qué? Ver una película es mucho más simple y entretenido, ¿O no?. Soy de esos espectadores que le gusta disfrutar ese íntimo momento con historias y montajes cinematográficos, involucrarme o conectarme con aquello que el director o sus actores buscan transmitir, pero en este caso no puedo dejar pasar escribir sobre este estreno, que fue de mi entera decepción. “El Hilo Rojo”, es una película para ver a Benjamín Vicuña y Eugenia “China” Suarez juntos y en acción, comprobar lo que en ese set se convirtió en el “romance” más comentado y mediático de la prensa rosa chilena y argentina.

Abril (Eugenia Suárez) es tripulante de aerolínea, y Manuel (Benjamín Vicuña) es enólogo, y entre ambos surge una fuerte atracción desde el primer momento en que se conocen arriba de un avión, pero su destino es interrumpido. La leyenda es un recurso que se sobreexplota en el desarrollo de esta historia, si bien el hilo rojo se puede tensar, pero nunca romper, siempre los va mantener unido. Después de siete años, se vuelven a encontrar y en Cartagena, ¿Novedoso o no?. Cada uno siguió con su vida, Abril tiene un hijo y convive con Bruno (Hugo Silva) un rock star y Manuel tiene una vida perfecta junto a Laura (Guillermina Valdés) una exitosa fotógrafa del mundo del arte y la música y su hija Rita. Pero, el reencuentro se da en un idílico hotel de Cartagena de Indias, escenas muy parecidas o mejor dicho un intento por ser similar a la película “Antes de la Medianoche” de Richard Linklater, les aviso que voy a spoilear…, sobre todo la escena en que ambos están en la ciudad amurallada y coincidentemente empieza a llover, corren y entran en una cueva y bajo la lluvia la pasión entre ambos es inmediata… Muy siútico y cliché, sólo faltaron los violines de fondo! Y por supuesto, no alcanza a tener un mínimo de relación con la última película de la trilogía romántica de Linklater. Pese a que cada uno tiene construida su vida, no es un impedimento para la infidelidad, pero la realidad supera la ficción.

Mi sensación con «El Hilo Rojo», es que sólo logra ser un melodrama liviano, con diálogos muy básicos, una historia sin construcción de personajes menos desarrollada como tal, de la mano de un guión sin trama, cargado de cliches y cursilerías. Hay una construcción exageradamente idealista y falsa de la vida, los escenarios son perfectos, las relaciones entre sus personajes son en base a un estereotipo cool, estrellas de rock, paisaje entre viñas y mar, se toma buen vino, chatean por whatsaap, sufren viendo sus fotos por Instagram y al ritmo de Amy Whinehouse, todo es “perfecto”.

Podríamos decir que lo más atractivo y real es la escena de sexo entre Vicuña y Suarez, se les ve conectados y es inevitable pensar en la realidad y se ve que lo están disfrutando. Si cabe destacar la atractiva y bien lograda campaña comercial para captar a los que hoy son sus mejores espectadores, su éxito de taquilla, si bien le ha ido bien en salas, eso no quiere decir que sea una buena producción. En cuanto a sus protagonistas es la actuación más débil que he visto de Benjamín Vicuña, venia de películas como “La Memoria del agua” y “El bosque de Karadima”, luciéndose con su interpretación para llegar a realizar un personaje que no tiene credibilidad y empatía, sumado a que no genera emoción, por otro lado Eugenia Suarez es cautivante, deslumbra con su belleza, es hipnótica, su personaje es más creíble y trabajado en esta historia de amor.

Definitivamente la película se ve superada por la realidad, por el recurso extra cinematográfico, las exageraciones, las forzadas situaciones entre ambos, y además de lo totalmente previsible que es.

País: Argentina
Año: 2016
Director: Daniela Goggi
Elenco: Eugenia Suárez, Benjamín Vicuña, Hugo Silva y Guillermina Valdés.
Duración: 100 minutos
Género: Romance, Drama